Todos los días me acuerdo de ti, a cada instante recuerdo todos aquellos momentos que pasábamos juntos, sobre todo aquellos días que salíamos a pasear alrededor de casa. Ahora que no estás conmigo me arrepiento de muchas cosas. Tenía que haberte prestado toda la atención que te merecías, darte todos aquellos abrazos que en varias ocasiones no te di, ir a verte cada vez que me llamabas… Ahora es cuando me doy cuenta de que no te valoré lo suficiente mientras estabas aquí conmigo y ahora que no estás no puedo dejar de pensar en otra cosa que no seas tu abuelo. Ojala hubiera una máquina del tiempo para retroceder al pasado e impedir que esto hubiera ocurrido, o por lo menos volver a recordar aquellos momentos de mi infancia en los que nos lo pasábamos tan bien y éramos tan felices haciendo cosas juntos. Cuando se van las personas que más quieres es cuando realmente te das cuenta de quienes eran tan importantes en tu vida.
Sólo te voy a decir una gran verdad, mientras siga viva te llevaré conmigo siempre y cuando no lo esté, espero verte en algún sitio del otro mundo y abrazarte tan fuerte como lo estoy deseando en este momento. Aquí seguiremos todos cuidando a la abuela y llevándote siempre en nuestros corazones. Esto no es un adiós, es un HASTA PRONTO.
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