Lectores y escritores

En este apartado el protagonista es el lector y sus creaciones, EL LECTOR ESCRITOR, en su sentido más amplio; es decir, no sólo el lector de mis libros sino todo aquel que quiera enriquecer este rincón literario con sus textos. Envíalos a la dirección:

miguelangelguelmi.escribe.narramos14@blogger.com



En el "asunto" de tu correo escribe el título de tu composición, tu nombre y, si lo deseas, tu lugar de residencia. Ejemplo:





La luz en la niebla. Pedro Márquez. Gran Canaria.



Por último, escribe o pega el texto en el cuerpo del mensaje.



¡Y RECUERDA! Cuida la ortografía y los signos de puntuación.



¡BIENVENIDOS!

Relato Breve V. Paula D.B 4ºC.

Y cada vez queda menos. Sueño con el día en que
 lo vuelva a ver. Poder contarle, después de tanto tiempo,
lo que me ha pasado en su ausencia. Darle un fuerte abrazo
y decirle: Hola hermano, ¿cómo te ha ido en todo en este tiempo?
Me encantaría que al llegar me cuente esa experiencia que ha
vivido. Durante este año, he echado en falta tantas cosas.
Sus tonterías, sus enfados, su risa y su diversión. Incluso
añoro escucharlo hablar y escuchar música  en la
madrugada. Tumbada en mi cama pienso en ese día.
 En tenerlo aquí de nuevo conmigo, y en que ya no se irá, porque
he estado jugando a ser hija única y, me he dado cuenta,
de lo importante que es en mi vida, y que ésta no sería
la misma si me él no estuviera.

Relato breve.Cynthia Santiago Gonzalez

Una noche,tube que quedarme sola porque mis padres tenían que salir a una cena de trabajo.
Eran las 8 y yo estaba en el MSN hablando con mis amigos y un poco más tarde fui a ver una película.
Cuando la película terminó , eran las 11 y tenía que ducharme,asi que fui a ello.
Mientras me duchaba tenía puesta música asi que no escuchaba nada más que eso,pero derrepente,la música se paró.
Me estaba ya secando cuando oí un ruído en el salón,asi que desde que terminé fui a mirar qué era, y era mi perra jugando con un juguete que le había comprado el día anterior.Pero justo cuando volvía a mi habitación oí una cosa mucho más fuerte,un ruído que venía de la cocina, y esta vez no era mi perra,porque ella estaba al lado mía.
Fuí a la cocina a ver lo que era,y justo cuando encendí la luz...

Relato. Coraima Marrero Molina

Sueños... siempre, desde muy pequeños hemos tenido sueños. Sueños que, tarde o temprano, se nos han cumplido y hemos sido muy felices al conseguirlos. Otros, que por mucho que lo intentemos, nunca se harán realidad porque son sencillamente sueños. Y a veces, cuando conseguimos un sueño, más bien uno de nuestros sueños más deseado desde niña... de repente ocurre. Se cumple. Nos sentimos las personas más felices del mundo pero no, siempre hay alguien que hace que nuestro mejor sueño se convierta en nuestra peor pesadilla. Y algo en lo que crees que te ha echo la persona más afortunada y feliz del mundo, resulta que te das cuenta que no, que fue tu sueño pero que, te lo arrancan de las manos y es como si nunca hubieras tenido nada.

Relato breve. PAULA BOLAÑOS GONZÁLEZ.

Por fin llegamos a Grecia. Cogimos un taxi que nos llevaría directamente hacia el hotel donde nos íbamos a alojar. Después de instalarnos, llegó la hora de la cena. Bajamos al comedor y tomamos una cena lo más parecida a la española, pues estábamos en un lugar donde la comida aún era desconocida para nosotros. Más tarde nos fuimos a descansar. Al amanecer comenzaba nuestra ansiada aventura. Empezaríamos por un crucero por las islas griegas. Nos gustaron mucho todas, pero la que más nos llamó la atención fue una en donde el único medio de transporte eran los burros y las piernas de los humanos. El resto del viaje lo dedicamos a conocer la historia griega, el Partenón, los Anfiteatros, el Estadio Olímpico… Regresamos con la sensación de que habíamos conocido y valorado mejor la cultura griega.

Relato breve. Jennifer Pérez Suárez

Alguien que no cree en el amor me dijo una vez "el amor, simplemente es una ilusión", y que, con el tiempo las cosas se pueden llegar a ver de muchas maneras diferentes.

¿En qué momento exacto se puede saber que un sentimiento es amor?

Yo, crecí con ese concepto del amor y a medida que los años pasaban, mi vida se iba formando de  aquellas "ilusiones" pasajeras, hasta que le conocí a él.

Al poco tiempo de conocerle me pregunté si los sentimientos que florecían eran simples ilusiones o se llamaban de otra manera. Hoy, después de un tiempo conociéndole , ya sé que es lo que me pasa…

Después de pasar el día tumbada en su cama mirándole mientras dormía, me he dado cuenta de que tiene dos lunares más de los que  recordaba  haber contado, que sus pestañas son simétricamente perfectas, que su labio superior es más fino y perfilado que su labio inferior  y cada centímetro de él, observé…

Mientras le miraba y su olor se fundía en mí, le cogí  de la mano y me dormí a su lado. Al despertar, su mano seguía apretada contra la mía y comprendí que un día alguien se había equivocado explicándome lo que era el amor, y que, mi mayor ilusión era dormirme cada noche  con su olor, contando sus lunares y amanecer cada mañana con su mano apretada contra la mía.

Mi sentimiento se llama amor y está compuesto por cada ilusión que puedo cumplir a su lado.

EDUARDO RODRIGUEZ JIMENEZ 4B.MICRORELATO

Si la vio fue por casualidad, porque él no quería verla. Ella le habló un poco y después se marchó.

Cuando Manuel llegó a su casa intentó terminar la mesa que estaba construyendo, aunque le resultaba difícil.  Era tal  la dificultad que su hijo vino a ayudarle. Solo tardaron cinco minutos en terminarla.

Después de terminarla a Manuel se le ocurrió una idea: invitar a su desagradable vecina a una comida en su casa para estrenar la mesa. La llamó por teléfono y se lo dijo. A Patricia, que así se llamaba su vecina, le pareció una gran idea por lo que  rápidamente se preparó y se marchó a casa de Manuel.

Cuando acabaron de comer se fueron con los dos hijos de Manuel a la playa. Se pasaron el resto  del día allí y volvieron a sus respectivas casas. Después de ese día, Manuel y su vecina se reconciliaron.

 

Relato breve. Almudena Rodríguez Betancort.

Me mira pero lo noto extraño, me habla de cosas sin sentido, está muy raro. Dentro de mí cabeza pienso muchas cosas, hasta que logro preguntarle por qué está tan serio. Él me lo niega, yo no le creo. Me preocupa mucho que esté enfadado conmigo o que ya no sienta nada por mí, últimamente lo noto muy seco y no me dice nada interesante. Anhelo escuchar un te quiero que salga de su boca, anhelo sentir un beso en mi mejilla, quiero pensar que solo son boberías mías y que todo seguirá como siempre. De pronto, cuando llega la hora de despedirnos siento que mi corazón se parte en dos , no me da dos besos, no me dice hasta luego, no me dice absolutamente nada de lo que estoy acostumbrada a escuchar, simplemente logra decirme : ahora seguro que te vas mosqueada. Tiene razón, ahora me encuentro en mi casa pensando lo que ha pasado y no logro comprenderlo solo necesito que me diga, cariño te quiero.

Relato breve. Lourdes Espino Fernández

Querido mar:

Quisiera ser libre como tú lo eres. Quisiera guardar tantas leyendas como tú lo haces. Quisiera ser el baúl que tantos secretos y recuerdos oculta. Me gustaría poder ser un escape de sentimientos y un ahogo de amarguras. 

Es hermoso ver cómo el sol se consume en ti y vuelve a salir intacto cada mañana. Te envidio. Te envidio porque eres el lugar de distracción preferido de muchas personas. El lugar perfecto para los enamorados y también para el solitario. 

Siempre juego a recorrer con la vista tu silueta azulada, intentando llegar más allá de tu horizonte. Me recuerdas los momentos más bonitos de mi infancia. Lo momentos en los que acudí a ti buscando algún consuelo. Nunca me has dejado sola, ni yo lo haré nunca. Júrame que siempre estarás tan bonito como desde siempre te conocí. Júrame que siempre estarás dispuesto a escuchar mis quejas, ya sean mil.

Querido mar, quiero ser como tú, estar siempre ahí.

Relato breve. Carolina Martín García



Este es uno de esos días de la vida en los que te sientes enfadado con el mundo,
de esos en los que solo quieres gritar hasta quedar sin voz, aunque sabes perfectamente
que esa no es ninguna solución, te apetece dormir para olvidarte, no pensar en nada y
cuando despiertes no recordar nada... Hacer como si nada hubiera pasado.

 Todos esos momentos negros, tristes e insoportables parecen no tener fin; estamos
en ese momento, sumidos de tristeza , enfado y decepción.
 Creo que cada uno de los miles y miles de habitantes del mundo ha tenido muchos
de estos días alguna que otra vez en su vida.

Relato Corto por Irene Viera Díaz

Era una de esas noches de tormenta, Elisa se encontraba en casa, sola como de costumbre. Presentía que algo malo iba a ocurrir pero aún así estaba tranquila. Ya eran las doce, pero seguía sin tener sueño así que comenzó a leer uno de sus libros preferidos. Estaba totalmente abstraída leyendo hasta que, de pronto, oyó algo a lo lejos, las suaves pisadas y la entrecortada respiración de alguien. Lo que Elisa no sabía era que ese alguien estaba muy cerca, mucho más de lo que ella pensaba. Dejó el libro sobre la mesa lenta y cuidadosamente, y de esta misma manera se levantó. Camino despacio por el salón, se mantenía tranquila, pero no debía haberlo estado. En ese mismo instante ocurrió, levantó la mirada y...

relato breve abril. Leonardo R.B

17 diciembre                  Florencia, ITA

 

El terremoto hizo que la alta torre del campanario de Giotto se desestabilizara y cayera cuan largo era. Leonardo contempló, estupefacto, como el gran pilar caía sobre la frágil tienda de su madre.

Solo quedó polvo y destrucción.

-¡NO!

Las lágrimas cubrían su rostro. Sin embargo, oyó una voz que le llamaba. Se dio la vuelta y vio a su madre, corriendo hacia ellos. Había ido a tomarse un café a una pequeña caffetteria de la zona.

-¡Mamá! Mamá... Papá ha muerto.

-¿Qué? – Ahora era la madre la que lloraba. –Pero... ¿Cómo?

- El terremoto. Ha destrozado la casa.

Después de un consuelo mutuo, se pusieron en marcha y buscaron un lugar donde poder pasar la noche. Acabaron en un albergue improvisado para las víctimas del terremoto, donde Leonardo, sorprendido, encontró a sus amigos reunidos, hablando seriamente. Leonardo se unió a ellos. No se creyó lo que le contaron.

Sandro Peérez Betancor . El Mar

EL MAR.

 

El mar aquella manta azul tan maravillosa y a la vez tan salvaje, capaz de ocasionar grandes desastres en muy poco tiempo. Ese mar en el que habitan infinidad de especies, muchas de ellas conocidas y muchas que faltan por conocer.

Ese al que los pescadores salen casi todos los días para pescar, o ese al que salen muchos surfistas a divertirse y a hacer lo más que les gusta, coger olas.

Pero no todo son cosas buenas lo relacionado con el mar, el ocasiona a veces muchos desastres, como lo sucedido en Japón o también las miles de vidas que ya se ha llevado, a pesar de eso para mí el mar es una cosa maravillosa en la que podemos divertirnos siempre y cuando el mar nos deje.

Relato breve marzo. Leonardo R.B

17 diciembre                      Florencia, ITA

 

-        ¡Papá! ¡Papá! –Gritó Leonardo corriendo hacia el rostro pálido y sangriento de su padre.

 

Lo sacudió suavemente, y al ver que éste no reaccionaba, desistió y apoyó la cabeza en su pecho mientras lloraba, desconsolado. Con delicadeza, le cerró los ojos a su padre y fue a  buscar a sus hermanos. Los encontró a los dos, a salvo.

Leonardo decidió llamar a su madre al móvil. Después de varios intentos fallidos, fue a buscarla junto con sus hermanos. Su madre tenía en una pequeña tienda dedicada a la reparación de ordenadores cerca del Duomo, que quedaba a unas calles de donde vivían ellos. Corriendo, Leonardo y sus hermanos contemplaron como el nuevo terremoto había devastado prácticamente todo el territorio: tapas de alcantarilla abiertas, grandes aberturas en el suelo, roturas en las paredes. Sin embargo, contemplaron que a medida que se acercaban al Duomo las roturas disminuían, por lo que Leonardo dedujo que el terremoto había sido pequeño a la par que eficaz.

Ya se veía al impresionante Duomo enfrente de ellos. No había ocurrido nada. Leonardo suspiró, aliviado. De repente, otro terremoto sacudió el suelo.

Leonardo R.B relato breve de marzo

Relato Breve. Mónica Bolaños

Las tostadas salieron volando, ajenas a mi hambre y a mi asombro. Saltaron de la tostadora, marchándose rapidísimo por la ventana. Yo, embobado con el cuchillo de la mantequilla en la mano, me quedé un rato allí, en la misma posición, como si esperara a que volviesen, o como si Carla me fuera a despertar con su codazo habitual.

Nada de eso pasó.

Carla ya no estaba, las tostadas tampoco. Ambas me dejaron el corazón y el estomago destrozado.

MICRORRELATO SOBRE EL MAR. CRISTINA RIVERO ROQUE 4B

Aquella mañana de otoño salí a dar un paseo por la avenida de la playa con mi nueva vecina. Estaba amaneciendo. Un paisaje muerto se despertaba tras la oscuridad. El mar se veía tranquilo y relajado, con pequeñas olitas que acariciaban a las rocas. Cuánta paz y tranquilidad se podía respirar en aquellos momentos. Ahora no puedo decir lo mismo. Relajaba ver esa llanura inmesa azulada, a los niños jugando en la arena, a sus padres viendo como se divertían. En el horizonte el mar y el cielo parecían una sola cosa, algo continuo. El aire se notaba fresco y limpio. Mi pelo bailaba con el viento. ¡Cómo deseo volver a esos tiempos!

Relato breve sobre le amr Daniel Del Pino Mendoza

Estuve pensando durante mucho tiempo sobre: ¿Qué escribir sobre el mar?.
Por mas tiempo que lo intenté no se me ocurría nada, hasta que me dí
cuenta de que, el mar es una parte que todo ser vivo necesita, ya que
el mar vive dentro de cada persona, pero el mar nos presenta a todos
por igual. Para algunos el mar es su medio de vida, como el de los
pescadores, para otros significa la playa el tiempo de vacaciones,
También existen los que cuando ven el mar sienten que vuelven a la
memoria recuerdos, ya sea de amores, de familiares que ya no están.
Pero para mí, cuando veo el mar recorre mi cuerpo una sensación de
libertad, cuando varias veces intento ver su final y no llego
encontrarlo, y pienso que el mar reaviva en mí, la necesidad de no
detenerme y luchar por mis metas, a seguir mejorando.

Relato breve sobre el mar. Almudena Rodríguez Betancort.

Estaba sentada junto al mar, miraba tan concentrada que si hubiera pasado algo terrible a mí alrededor no me hubiera dado cuenta. Derepente noté que me estaba mojando, el agua salpicaba poco a poco sobre mí. Yo inmóvil me quede allí, sentada, relajada, junto a un puente maravilloso. La puesta de sol se acercaba, era lo más bonito que podía haber visto nunca. Sin darme cuenta, alguien se había sentado a mi izquierda. Cuando me viré era mi abuela, tan guapa como siempre sentada a mi lado. En silencio, las dos juntas contemplemos la tarde tan maravillosa que estaba delante de nuestros ojos, un mar sereno, tranquilo, hermoso. Las olas se peleaban por llegar a la orilla, una detrás de otra nos avisaban a mí y a mi abuela de que todo tiene un final, cada una de ellas se rompía y ya ahí no había marcha atrás.