Lectores y escritores

En este apartado el protagonista es el lector y sus creaciones, EL LECTOR ESCRITOR, en su sentido más amplio; es decir, no sólo el lector de mis libros sino todo aquel que quiera enriquecer este rincón literario con sus textos. Envíalos a la dirección:

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La luz en la niebla. Pedro Márquez. Gran Canaria.



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Recortamos - viajar en verano- Jessica GR- AG

 

                                                Viajar en verano


    Una tarde de verano se encontraban en casa Emilio y Saray preparando unas vacaciones con mucha ilusión, ya que, durante el resto del año, habían conseguido ahorrar una buena cantidad de dinero.

  A Emilio y Saray les gustaba viajar, porque así conocían lugares nuevos, veían otros paisajes, experimentaban nuevas experiencias y podían aprender muchas cosas.

Por eso, aquella tarde mirando los anuncios en periódicos e internet en el salón de su casa, vieron una oferta para irse al día siguiente, a un bonito hotel donde podrían relajarse y descubrir todas las bellezas de los rincones y calles de Venecia.

  Los dos hermanos, se miraron entusiasmados, y aunque sabían que era un poco precipitado, les emocionaba la idea, ya que desde pequeños habían soñado con pasear en góndola por sus calles.

  Casi sin pensarlo, reservaron el paquete de viaje y se pusieron como locos a preparar las maletas. Y mientras tanto Emilio, llamó a su tío Gerardo para ver si los podía llevar con su nuevo coche al aeropuerto, y el, encantado acepto a llevarlo en su nuevo mini.

  Al día siguiente, Gerardo pasó a recogerlos para llevarlos al aeropuerto, pero en el camino el coche se les averió, quedándose parado a medio camino del aeropuerto.

Saray y Emilio asustados porque iban a perder su avión que los llevaría a sus vacaciones, miraban desesperados como su tío se revolvía entre los cables del coche para arreglarlo. Y de repente, un pequeña explosión  hizo que se le pusieran los pelos de punta al tío Gerardo y saliera humo del coche, todos asustados de se miraron confundidos, cuando de repente coche se puso en marcha.

  Todos se pusieron en marcha rápido camino del aeropuerto, Saray miraba desesperada el reloj, Emilio se mordía las uñas y el reloj parecía ir cada vez más rápido, hasta que al fin llegaron al aeropuerto, corrieron desesperados hacia el avión, que por suerte se había retrasado en su salida y pudieron subirse.

Y así al fin Emilio y Saray pudieron cumplir su sueño de montarse en góndola y dar un paseo por las calles de Venecia.


Material (fotos)

- dos coches

- dos personas en un salón

- paisaje de Venesia

- hombre electrocutado

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