Lectores y escritores

En este apartado el protagonista es el lector y sus creaciones, EL LECTOR ESCRITOR, en su sentido más amplio; es decir, no sólo el lector de mis libros sino todo aquel que quiera enriquecer este rincón literario con sus textos. Envíalos a la dirección:

miguelangelguelmi.escribe.narramos14@blogger.com



En el "asunto" de tu correo escribe el título de tu composición, tu nombre y, si lo deseas, tu lugar de residencia. Ejemplo:





La luz en la niebla. Pedro Márquez. Gran Canaria.



Por último, escribe o pega el texto en el cuerpo del mensaje.



¡Y RECUERDA! Cuida la ortografía y los signos de puntuación.



¡BIENVENIDOS!

Conversión: No vuelvas, me das miedo. Abenaura González




From: abenauragonzalez@hotmail.com
To: miguelangelguelmi.escribe.narramos12@blogger.com
Subject: No vuelvas, me das miedo. Abenaura González
Date: Tue, 9 Apr 2013 19:04:32 +0100

Mi relato corto.


No me das miedo tú, no me malinterpretes, me da miedo tu recuerdo. Te tengo en algún rincón de mi mente, y por las noches oigo tus gritos diciéndome que te libere, que te sienta (Y vaya si te siento) Casi siempre consigues escapar, y yo me quedo en un rincón abrazándome, rezando para que no me encuentres... Siempre me encuentras. Y mi corazón intenta escapar de ti pero tú me susurras que me tranquilice, que no vas ha hacerme daño... pero ya me conozco el final de esa historia... cuando consigo creerte tu cara cambia por completo, dejas de infundirme valor y me sonríes de tal manera que yo vuelvo a chillar. Y como cada noche te abalanzas sobre mi y me arrancas el corazón del pecho para después irte y dejarme sola otra vez, sangrando. Cuando dejo de oír tu macabra risa por el eco de mis rincones, miro mi pecho, ahora abierto y vacío como un agujero negro. Duele, los bordes me queman, ensanchándose más y más, consumiéndome poco a poco. Es como si me atravesaran con miles de clavos oxidados ardiendo, cada pinchazo es un recuerdo.
...........Así es como despierto, chillando y empapada, no en sangre si no en lágrimas. Pero el vacío en mi pecho y el eco de tu risa continúan. 
Me da miedo quedarme sola; me da miedo guardar silencio, porque entonces tu voz vuelve a atacarme. Siempre vuelve...
Mi pecho es como un pozo, donde estaba mi corazón ahora queda un agujero al que da miedo asomarse. Y cuando cae la noche se abre, empieza a sangrar, los bordes vuelven a arder ensanchándose más y más. Todo esto solo lo causaste tú, y por eso me da miedo volver a confiar en alguien; tú tienes la culpa, me has echo insegura. ¿Y si vuelven ha hacerme daño? No quiero parecer un maldito queso, lleno de agujeros. Un día me partiré. Por ahora intento ni gritar cuando las punzadas empiezas a inyectarme queroseno, pero siempre amanezco acurrucada, presionando con fuerza mis manos contra ese abismo de cicatrices.
Me da miedo que vuelvas a aparecer, o que tanto desgarre la herida que acabe cayéndome a pedazos. Me da miedo que aparezcas con otro nombre y otro rostro, pero que sigas siendo tu, y vengas a terminar con lo que un día empezaste; que vengas a terminar con mi dolor. Con mi vida.





No hay comentarios:

Publicar un comentario