No lo soñé
Cada día, al despertar, me doy cuenta de que poco a poco, todo va cobrando sentido, que cada vez se hace más y más real, hasta un punto en el que ya no hay vuelta atrás. Ese punto de inflexión en el que sabes, que por mucho que te niegues a admitirlo, siempre estará ahí. Cuando paso por todos los lugares que recorrimos juntos, como un equipo, el uno para el otro, sin mirar atrás ni pensar en el futuro, solamente viviendo el presente, todos los recuerdos vienen a mi cabeza. Recuerdos que desearía borrar para poder empezar de cero, recuerdos que desearía suprimir pulsando una tecla, pero desgraciadamente, mi mente no es un ordenador. No digo que ninguno de esos recuerdos fueran buenos, ya que en su mayoría todos lo fueron.
Pasan los días, y no hay noche que me no me acueste sin pensar antes en todo aquello, todo aquello que he intentado enfocar desde distintos puntos de vista, todo aquello que al principio me parecía demasiado bueno para ser verdad, todo aquello que por muy bueno que fuera o fuese, sabía que tarde o temprano, terminaría. Cuando veo a todos aquellos, que pueden disfrutar de la compañía de alguien, que se les ve felices, contentos, me paró a pensar y me pregunto " ¿Qué demonios hice mal?", pero prefiero dejarlo pasar, que tarde o temprano algo bueno llegará, sea lo que sea, cuando y como sea.
Pero lo malo de toda esta historia, es que tú, no estás aquí para escucharlo, nunca leerás esto, nunca sabrás lo que pasó, tanto tú como yo sabemos que fue real.
Por eso, cada mañana, al abrir los ojos, los cierro por un instante y pienso " Solo ha sido un sueño, un maldito sueño", pero, ¿sabéis que es lo peor de todo?, muy sencillo, muy fácil, simplemente, pasó, sé que lo viví y lo más importante, pero a la vez triste es que...no lo soñé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario