El mundo mágico de Marcos.
En un pueblecito costero llamado Altea, vivía Marcos, un niño de 8 años apasionado del deporte y especialmente del baloncesto. Su padre, Alejandro, trabajaba en la única biblioteca del lugar.
Desde que Marcos era un bebé, su padre le leía cuentos de unos libros muy antiguos que había encontrado en la biblioteca y que estaban descatalogados. Su padre hacía que Marcos fuese el protagonista de todas las historias, con lo que el niño viajaba cada noche a un mundo imaginario en el que le sucedían cosas tales como…
"Marcos y su perro Manchitas se adentraron en un bosque en busca de un tesoro perdido, por el camino se encontraron con unos seres mágicos que conocían todos los secretos del bosque. A cambio de conocer el lugar donde se encontraba el tesoro, Marcos debía superar cinco pruebas que iban a suponer un aprendizaje importante para su vida. Al superar las pruebas fue conocedor de la ubicación del tesoro, se encontraba a cinco pasos hacia el noroeste de la caseta de Manchitas. Corrió a buscarlo y al abrir el cofre quedó boquiabierto porque en su interior halló un montón de libros viejos con fantásticas historias".
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