¿Y si no es verdad? Eduardo Rodríguez Jiménez

                                        Y SI NO ES VERDAD

Me desperté, era tarde ¡oh no, se me hace tarde para ir a estudiar! Enseguida me tranquilicé, porque ese día era sábado. Estuve en mi casa muy tranquilo pero a la vez pensativo. ¿Por qué estaba pensativo? No lo sé pero da igual. A mi mente, además de pensamientos le viene una preocupación.

 Estoy en cuarto de la eso a punto de sacar el graduado escolar. Por cierto creo que me lo merezco por haber aprobado tantos cursos. Pero y si no es verdad y yo voy a empezar dentro de dos días en primero de la eso. O lo que es peor aún ¿si he repetido algún curso?

 Salgo a la calle y a la vez que oigo música y camino dejo la mente en blanco para que no me venga la preocupación de tener que empezar en primero de la eso. El día ha pasado rápido y yo como no tengo nada que hacer me voy a dormir. Bueno no  dormí, pero era por el problema que tenía. Con algo me tenía que entretener para poder dejar la mente en blanco otra vez. Me despierto, cojo un libro y me pongo a leer. Interesante lectura pero lo que no era nada interesante era volver a empezar en primero de la eso. No quería que fuese lunes pero algo surge. Anuncian por la tele que va a ver un temporal en el que caerá agua, granizo ¡y nieve!. ¿Cómo va a ser eso? Pregunto yo. Bueno que cayera nieve era un gran paso para no ir al instituto.

Domingo por la noche y ya me empiezan a dar dolores de barriga. Tengo los nervios a flor de piel. Cuando me despierto todavía tengo sueño pero el problema no es ese, el problema es que al final no se van a suspender las clases por tormenta. Llego al instituto y tengo que empezar en primero de la eso. !oh no otra vez no!. Pero si, esa era la cruel verdad. De todos modos empiezo a conocer a gente nueva y a profesores nuevos. Cuando llego a mi casa empiezo a recordar y a añorar los buenos tiempos que pasaba con mis compañeros. Los he perdido a todos porque sacaron el graduado escolar y se fueron a un sitio llamado paro: 6 millones de personas.

Bueno, me empieza a preocupar la situación y yo también me empiezo a preocupar. Me pongo a ver la tele, pero no aparece ningún programa que me guste. Me van bien las clases apruebo todos los exámenes. Bueno al fin y al cabo un poco de alegría me da. Más alegría me dio cuando aprobé la primera evaluación. Pero yo sigo insistiendo: esta situación no me gusta nada, absolutamente nada. Bueno se me acaba de ocurrir algo: voy a ver que opina mi familia. Lo primero que veo es que a ellos no les gusta la situación. A mi tampoco me gusta pero yo no me derrumbo porque ahora me he vuelto a poner pensativo y esta vez lo que pienso es: ¿y si no es verdad?